Internas
Caballo de Carreras: Inversiones Públicas vs. Privadas
Horacio Ornelas Ramírez
25 de marzo 2023
¿Quién diría que la inversión privada en nuestro país del sexenio sería una armadora de automóviles eléctricos, mientras que la mayor inversión privada del sexenio sería una refinería cuyos refinados no suministrarán esos autos? En ocasiones no nos damos cuenta lo surrealista que es México, con sus contradicciones e ironías. Sobre todo, da risa, ¿no? Sin embargo, el trasfondo de ambos puede ser tan bien o tan mal fundamentados como uno quiera verlo. En esta metafórica carrera de caballos, ¿quién tendrá el corcel ganador? Y más importante: ¿quién tiene el mejor jinete?
La soberanía energética promulgada por el Presidente es para muchos un dogma ideológico promulgado por una concepción nacionalista y desconfiada de los gringos; quienes con sus recientes avances tecnológicos, son actualmente los mayores productores de petróleo a nivel mundial. A la vez, tanto EEUU como México están en proceso de una transformación energética: cambiar de combustibles fósiles a energías renovables. Uno de los productos de estos cambios son los autos eléctricos: a mi parecer es la reinvención del hilo negro. De este raciocinio nace Tesla, la gigante automotriz.
El choque de ambas inversiones es palpable en México: mientras un grupo político e ideológico atrae la inversión privada de empresas con tecnologías limpias, otro apoya fielmente a las tecnologías viejas y contaminantes por nostalgia a una época dorada. Aunque parece obvio cuál es mejor, yo opinaría que ambas tienen sus méritos y severas fallas, de tal modo que realmente prefiero a ninguna.
Comenzando por Dos Bocas: una refinería a sobrecosto que existe únicamente para saciar al ego de un triste imitador a Lázaro Cárdenas. En un mundo donde México se integra a los países de América del Norte, el petróleo debe ser un recurso libremente intercambiado para beneficio de todos, no un motivo de “seguridad nacional”. No hay país a quién le preocupe más el mercado de gasolinas de México que EEUU: ¿de qué otra forma transportarían todas las mercancías a través de la frontera? Es un absurdo la existencia de la nueva refinería en Coatzacoalcos, y todavía más cuando la refinería Deer Park no solo fue más barata y está operando, ¡ya está dejando ganancias!
En cambio, Tesla dará trabajo estable a miles directamente y decenas de miles indirectamente. Es el reflejo de un México moderno e industrializado: competitivo a nivel mundial. Sin embargo, el historial de Tesla muestra deficiencias muy severas que lo podrían llevar a situaciones precarias. La compañía de Elon Musk es famosa por requerir extensivos subsidios y beneficios fiscales para mantenerse rentable, sustentados en sus características como una empresa “verde”. A la larga, estas empresas suelen ser una carga ya que no contribuyen su porción justa al erario. Pero incluso con las reducciones en sus impuestos, los coches que hacen secretamente son más contaminantes que un auto de combustión interna, así como su kilometraje debido a la matriz energética de México. Lo más preocupante de todos es que Tesla no hace buenos coches: sería mucho mejor tener una BMW o un Honda que un Tesla con (relativamente) poca experiencia haciendo autos.
El futuro dirá cuál inversión fue la mejor para los mexicanos que hagan sus vidas de esas industrias. Los combustibles fósiles no están próximos a desaparecer del mercado, a pesar de lo que digan los Objetivos de Desarrollo Sustentable de la ONU. A la vez, quién sabe si Tesla, o en general los autos eléctricos, sean el futuro. La tecnología, como es actualmente, no es apta para nuestras necesidades; contamina más y requiere de más materiales más exóticos que un auto convencional. Uno incluso podría decir que una red ferroviaria nacional sería más transformacional para el desarrollo del país, como lo es en todos los países de Europa. Lo que se sabe, es que para el futuro de México, se necesita apostar por el mejor corcel: aquel que traiga más prosperidad al pueblo mexicano.
Referencia:
https://www.eleconomista.com.mx/opinion/Tesla-si-invertira-en-Mexico-20230228-00 03.html